Como el que no quiere la cosa nos hemos cargado la Navidad. El primer dia ya pasó y el segundo está al caer. Lo del tercero y demás gaitas ya no cuenta. Es verdad que antes hemos tenido que pasar por la prueba de la loteria y los niños/niñas de San Ildefonso diciendonos que no nos ha tocado nada, hemos pasado la prueba de la comida del 24 y la de la noche del mismo dia. Pero, como no todo dura más de una vida, ya se vislumbra el final de la natividad.Ahora, a por el fin de año. Con sus uvas, sus cotillones, sus matasuegras y sus gorritos e gnomos. Todo muy novedoso. Hasta el fundit de visa se repite año tras año. Pero ahí estamos, viendolas venir, como Carlos III en la Puerta de Alcalá.
Ánimo, queda menos.
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